Anna Calvete -account manager del programa de afiliados Star Partner– comparte la experiencia de su equipo en el evento London Affiliate Conference LAC, el cual finalizó el fin de semana pasado.
Con el equipo de Star Partner llegamos a Londres el jueves 27 de enero, luego de 11 horas en avión y nuestro vuelo original cancelado, pero con ganas de trabajar y contentos de estar en el viejo continente.
Fuimos a dar una vuelta primero por ICE, el evento que tuvo lugar los días anteriores a LAC y que cubre todos los aspectos del juego, terrestre y en línea. Allí tenían su stand empresas de software como Microgaming, sistemas de pago como Neteller o Moneybookers, y hasta empresas que se dedican a hacer los asientos del casino e incluso vender tragaperras de segunda mano.
Al día siguiente, con el stand ya montado, comenzamos a trabajar duro. Nuestro objetivo en una conferencia es conocer a afiliados existentes y ponernos cara además de promocionar nuestras marcas y nuestro programa de afiliación a otros afiliados. Normalmente, nunca vamos a las ponencias.
Yo he notado que existen varios tipos de afiliados, el que pasa de largo del stand sin mirarnos (¿por qué?), el que camina y te mira tímidamente (normalmente nuevos afiliados) pero que te escucha y te cuenta sus proyectos, y el que se dirige a ti con paso firme y tiene las ideas bien claras (afiliados experimentados). En cualquier caso, allí estuvimos las 3 gerentes de afiliados de Star Partner al pie del cañón intercambiando tarjetas, experiencias y planes.
El stand de Star Partner ofrecía a los afiliados, aparte de la oferta inicial de 60,50 y 40% para los 3 primeros meses, mojitos y piña coladas a partir de las 12. A las 6 de la tarde, dejamos el stand para prepararnos para la segunda parte de la conferencia, la fiesta.
La fiesta del viernes fue un poco caótica porque el local estaba abierto al público, pero la del sábado fue en un local reservado solo para nosotros y, por tanto, menos masiva. Lo pasamos bien bailando con afiliados y con otros operadores, dejando los negocios a un lado y simplemente disfrutando de la música y la compañía en una ambiente cosmopolita con profesionales de todo el mundo.
El domingo 30 dejamos las frías temperaturas de Londres, cansados, pero con la certeza del trabajo bien hecho.
