En la región de Johor Baru, en Malasia, la actividad gambling ha crecido sorpresivamente rápido durante los últimos meses, ignorando las leyes locales que prohíben la actividad. Según las últimas noticias, los ciudadanos del lugar han denunciaron varios locales encubiertos, en donde operarían centros que ofrecen actividad de gambling durante todo el día.
El conflicto se resume en el hecho de que las leyes de Malasia no permiten aún el gambling, al igual que con la religión islámica.